Porque, por si no lo sabías, existe
“Los políticos son siempre lo mismo. Prometen construir un puente aunque no haya río” (Nikita Jrushchov).
Tras la irrupción de PODEMOS en las elecciones europeas mucho se ha debatido sobre cómo llegan los políticos a los ciudadanos y si los departamentos de marketing de los partidos están desfasados y necesitan dar una vuelta de tuerca a su forma de comunicar y hacer entender a sus políticos. Desde luego no cabe duda que PODEMOS ha encarado sus tareas de comunicación como primordiales, ayudados por el hecho de que Pablo Iglesias sea un tertuliano de referencia en España desde hace años. Con este post queremos presentar las diferentes formas en las que se presenta el marketing político. Los partidos deberían tomar buena nota.
A grandes rasgos, el marketing político es la influencia que se puede lograr en las personas en cuando a temas de la rama en específico: votar por ciertos candidatos o por otro tipo de asuntos públicos. Pero hay más que decir acerca del marketing político para entender cómo funciona. A continuación, tres definiciones útiles.
1. Avraham Shama, del departamento de marketing de la Universidad Baruch en Nueva York, lo define como “el proceso mediante el cual los candidatos políticos y las ideas son dirigidas a los votantes en orden de satisfacer sus necesidades políticas y ganar su apoyo para apoyar al candidato y sus ideas”.
2. El Doctor Bruce I. Newman, profesor de mercadotecnia de la Universidad DePaul en Chicago, define el marketing político como “la aplicación de principios de mercadotecnia y procedimientos en las campañas políticas de varios individuos y organizaciones. Los procesos involucrados incluyen el análisis, desarrollo, ejecución y gerencia de campañas estratégicas de candidatos, partidos políticos, gobiernos, lobistas y grupos interesados en influenciar la opinión pública, dar avance a sus propias ideologías, ganar elecciones y hacer legislaciones en respuesta a las necesidades y requerimientos de personas selectas”.
En el libro Political Marketing: Theoretical and Strategic Foudations de Wojciech Cwalina, Andrzej Falkoski y el mismo Bruce I. Newman, definen el marketing político como “la integración de propuestas que permiten tener un entendimiento del comportamiento humano”, que es la base para lograr una buena campaña de marketing político, pues se hace “énfasis en los mecanismos psicológicos del comportamiento del votante” y que “no se limita solo a los periodos de elecciones y campañas, pues ya no hay diferencia entre la elección y el resto del calendario político”. Mantener la estrategia durante toda la temporada, construye confianza, credibilidad y legitimización. El marketing político “es una disciplina. El estudio de procesos e intercambios entre entidades políticas y su ambiente, con referencia particular del posicionamiento de comunicaciones en distintas entidades”.
Como veis, la idea que subyace detrás de todas las definiciones es la conexión que debe existir entre el mensaje que se envía y el receptor. En este mensaje pueden fallar varias cosas, desde su propio contenido hasta que el emisor no sea reconocido como alguien de confianza. Si fallan esas dos cosas no hay nada que hacer, por muy bonito que sea el envoltorio. Ésa idea la ha tenido clara PODEMOS desde el principio: que el mensaje llegue a la gente y que su emisor sea alguien en quien se puede depositar confianza. Ahora falta lo más importante (y lo más difícil): que sean capaces de mantener esa confianza que se han ganado.
Imagen: ¿Qué puede hacer el PP y Rajoy para frenar el avance de PODEMOS?
En www.uxxia.com ofrecemos servicios low-cost de consultoría, inteligencia competitiva, marketing online y social media que pueden ayudarte a potenciar tu negocio. Si quieres realizarnos una consulta, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través del email info@uxxia.com
Hi thanks foor sharing this
Thank you for your feedback.